Aunque estamos entrando nuevamente en campaña electoral, por ahora parece más bien tranquila. Casi la mitad de los montevideanos (49%) piensa votar al Frente Amplio; algo menos de un quinto (18%) al Partido Nacional; el 12% al Partido Colorado, y el 1% al Partido Independiente. El resto (en total, otro quinto, 20%) no sabe, o no dice, o votaría en blanco. Por lo tanto:
(a) en este clima de opinión el FA es favorito cómodo, particularmente teniendo en cuenta que en las elecciones departamentales gana directamente el partido más votado (no se precisan mayorías especiales);
(b) para ser honestos este resultado no es noticia; es lo que espera la gran mayoría de los montevideanos;
(c) algunos de los resultados de la encuesta, sin embargo, aportan información nueva. En particular: los indecisos son bastante más favorables a la oposición que al FA, que con estos datos captaría entre 3 y 4 de cada diez indecisos. En este clima de la opiniónel FA podría obtener entre el 54% y el 55% de la votación montevideana;
(d) ¿esto es mucho o es poco? Por un lado, sería mayoría absoluta propia: esto es mucho. Por otro lado, sería la votación más baja del FA desde que las elecciones departamentales se separaron de las nacionales. En las departamentales de 2000 el FA obtuvo el 56%, y en las de 2005 obtuvo el 58%;
(e) todo esto, sin embargo, es lo que sugiere el clima de opinión registrado por esta encuesta. Faltan dos meses para las elecciones, y la campaña “en serio” todavía no comenzó. Podría decirse que esta encuesta es la foto en el momento de la largada: ya se sabe quiénes son los candidatos, y ya hay apuestas. Pero falta toda la carrera, y corriendo se ven los pingos.
En la competencia dentro de los partidos que llevan más de un candidato, hay que analizar los datos con las mismas cautelas ya indicadas (en realidad, las cautelas deberían ser aún mayores). En el Partido Nacional arranca adelante Analía Piñeyrúa (con 12%, frente a 6% de Javier de Haedo). Pero Piñeyrúa tiene hoy bastante más visibilidad que De Haedo, cosa que la campaña seguramente afectará, y es imposible anticipar qué consecuencias podría tener ese “emparejamiento” de visibilidades.
Entre los colorados la ventaja inicial es para Ney Castillo (9%), contra 3% para Villar. También aquí las campañas y las acciones de los candidatos serán decisivas.
En conjunto, la característica más notable de esta campaña es que hay muchos candidatos con madera potencialmente muy buena, pero casi todos tienen poca visibilidad, y sólo quedan dos meses para ampliar y afirmar esas visibilidades.
NOTA
Esta nota presenta los resultados de una encuesta departamental de CIFRA en Montevideo: 604 entrevistados cara a cara en sus hogares entre los días 27 de febrero y 2 de marzo. La muestra de encuestados es probabilística y el margen de error máximo esperado para un 95% de confianza es aproximadamente 4 puntos porcentuales en más o en menos (+/- 3,99).
El texto de la pregunta formulada a los encuestados es el siguiente:
“Estos van a ser los candidatos a Intendente de Montevideo. En principio, ¿a cuál de ellos piensa votar?”
Las figuras muestran los candidatos cuyas intenciones de voto llegan al menos al 1%. Las intenciones de voto por partido presentadas en la Figura 1 muestran la suma de las intenciones de voto hacia los candidatos de un mismo partido (De Haedo y Piñeyrúa para el P. Nacional, Castillo y Villar para el P. Colorado), o las intenciones de voto hacia los candidatos únicos (en este caso candidatas, Olivera del Frente Amplio y Demarco del P. Independiente).